Los Barros, una familia bien del Milrayitas. Diego ya sigue los pasos de su hermano Jeremías, ambos hinchas de toda la vida, quien en 2018 saltó al profesionalismo. Ahora le llegó la oportunidad al picante punta categoría 2005, que hace dos semanas fue promovido nuevamente al plantel de Primera División.
“Estoy muy contento por firmar mi primer contrato. Estaba esperando esta oportunidad y por fin llegó. Tanto yo como mi hermano siempre soñamos con ser jugadores de Los Andes y por suerte ahora se me está cumpliendo a mí”, expresó el joven oriundo de Llavallol en diálogo con el Sitio Oficial.
Dieguito, como lo conocemos todos, llegó a Los Andes a los 11 años. Tal fue su rendimiento en las divisiones inferiores, que, a los 14, Germán Cavalieri lo subió a Primera. Luego se sumó a la Reserva de Fede Caglieri y ahora, de la mano del Búfalo Szeszurak, comenzó su segundo ciclo junto al primer equipo.
“Me pone feliz volver a Primera. Estoy entrenando muy duro para el día que me llegue la chance de jugar y poder dejar todo por esta camiseta”, aseguró y agregó: “Esto lo quiero compartir con mis viejos, mis hermanos, mi novia y mi hijo. Ellos siempre estuvieron al pie de cañón tanto en las buenas como en las malas”.
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