¿Cuándo y cómo comenzó esto para que estalle? Fueron solo 48 horas de desplantes, cambios de horarios, fechas, estadios y una guerra política en el medio de un partido de fútbol. Un papelón más de los organizadores AFA, Torneos, Aprevide y Municipio de Lanús que tuvo como vocero a Diego Kravetz, Jefe de gabinete de la intendencia.
Con varias postergaciones de posibles escenarios, la semana pasada por fin se estableció una fecha definitiva, 1° de junio, y el estadio de Lanús como sede para recibir a los dos equipos y sus simpatizantes. Recién la confirmación oficial se realizó el lunes 30 por la tarde, que tenía como horario a las 19.30 horas, descartadas las 21.00 y 19.00 horas. Así ambas instituciones informaron a sus hinchas sobre la ventas de entradas.
Pero el martes a la mañana abruptamente se cortó la venta en las boleterías: La municipalidad de Lanús suspendía el partido en su municipio para "cuidar a los vecinos", allí donde hace menos de un mes jugaron con público Boca y Racing, ambos con problemas internos en sus barras. Pero para el mismo Kravetz, el que tenía derecho de admisión era Los Andes porque la hinchada tienen conflicto con las barras de Talleres y El Porvenir, según señaló el funcionario confeso hincha xeneize, quien al parecer no tiene idea de los vínculos entre las barras del equipo de sus amores y el conjunto de Lomas. ¡Despierten a Kravetz para que le pregunte a sus socios políticos sobre la interna de la barra Boquense, ya que seguramente dejaron entrar a su enemigo lomense en su municipio y en la misma cancha, mientras el funcionario festejaba el pasaje a la final de Boca! ¿O solo lo omite y divide?
Esto generó que se abra nueva incertidumbre y, ante la falta de respuestas de los organizadores, el Ministro de Seguridad de Buenos Aires, Sergio Berni, tomó el mando y notificó a la productora Torneos su resolución: disputar Los Andes vs Tigre en cancha de Deportivo Morón a las 16.00 horas, pero a puertas cerradas, aclarando que "dicha decisión obedece estrictamente a que faltando menos 24 horas para que se lleva a cabo dicho espectáculo, esa empresa no ha podido comunicar el lugar de su organización, independientemente de las garantías que ha ofrecido este ministerios", señaló el mandamás de la seguridad bonaerense.
Ante esta posición y la falta de seriedad de la organización, la comisión directiva de la institución de Lomas de Zamora emitió un comunicado resaltando que "ante la imposibilidad de asistencia de los y las hinchas Milrayitas, Los Andes mantiene su postura expresada en la tarde de hoy a las autoridades: nuestro Club no irá donde no pueda ir su gente".
Tras que una vez más la AFA modifique el horario de las 16.00 a las 20.00 horas (los iluminados popes de la institución mayor del fútbol argentino no querían que el partido de la Copa se superponga con Argentina vs Italia y también planearon para que haya tiempo para postpartido, pero en ningún momento estuvo en duda la realización del encuentro del Matador y el Milrayitas ante semejante desorganización a horas de disputarse), Copa Argentina montó todo el escenario en el oeste del Gran Buenos Aires como si nada hubiese ocurrido en las últimas 48 horas. El plantel de Tigre se presentó silbando bajito y hasta se animó hacer la pantomima de un entrenamiento compensatorio, cuando no había nadie del elenco lomense, y aprovechando las luminarias.
Ante este escenario y ya habiendo aguardado el tiempo correspondiente al conjunto de Lomas, el árbitro Lucas Comesaña suspendió el partido, para sellar el fin de este manoseo, papelón y falta de profesionalismo de parte de los organizadores que perjudicó a ambas instituciones y parcialidades, que a menos de 24 horas se enteraron que se jugaría sin público.
Alguna vez, el grano de la desorganización iba a reventar. Ahora todo está en manos del Tribunal de Disciplina de la AFA.
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