Los Andes pudo
cumplir con el sueño y la ilusión de obtener la consagración en el torneo y,
junto a ello, el pasaje directo y sin escalas a la B Nacional. Eterna alegría
que obtuvieron los futbolistas del Milrayitas con una gran campaña, al ser
líder de punta a punta...
Si bien no había logrado alcanzar el reducido, el plantel dirigido
por Fabián Nardozza encaraba el nuevo torneo y formato basado en los pilares
del campeonato anterior como Maxi Gagliardo, Fernando Lorefice, Emmanuel
Martínez, Luis Zeballos, Daniel Franco, Juan Segovia y Ale Noriega, a los se le
sumaron apenas algunos apellidos destacados: Digo Cisterna, Gregorio Abregú y
el regreso al sur del gran Buenos Aires de Damián Luna, Maxi Barreiro y el Toro
Ruiz Díaz, como baluarte y referente del plantel. Además del regreso de Franco
Ruibal, el plantel se completó con pibes con pocos partidos en primero o que
harían sus primeras armas en el equipo.
Sin embargo, en las primeras fechas, el jugador que más
sorprendió fue Diego Galeano, primera incorporación de la pretemporada, a
fuerza de amagos, velocidad y precisión en cada centro al área. Un típico wing
que rompe juego por las bandas.
De media vuelta y contra Villa San Carlos, Noriega abrió el
camino de los goles y triunfos para encaminarse a estar punteros desde el mismo
comienzo del torneo y escribir racha una histórica de suma de puntos que dio
por tierra inclusive la lograda la temporada anterior con el mejor inicio de
torneo al conservar 12 partidos el invicto, donde jugó también un papel clave
la defensa del equipo que tan solo había recibido tres goles en contra.
Tras quedar libre, el equipo confirma sus pretensiones de
obtener el título al ganar en Morón con un golazo de alta factura de Maxi
García, quien se fue ganando el puesto a base de seguridad y tantos, con un
sutil toque por sobre el cuerpo del arquero del Gallo y a pesar que el Chipi
Vera se había adjudicado el tanto al asegurarlo de cabeza en la línea. Luego se
consagra con una gran goleada ante Armenio con los gritos de Dieguito Galeano,
Daniel Franco y dos de Noriega, quien ya daba los primeros pasos para ser uno
de los Capo Canionere del certamen.
A pesar de jugar muchos partidos entresemana, el equipo no
detuvo su marcha, se mantuvo líder de la zona y alcanzó halagos contra Tense,
Susso, UAI Urquiza y Almagro para alcanzar 24 unidades en tan solo diez juegos
¿Cómo no ilusionarse? El objetivo se estaba cumpliendo pero no había que
dormirse. Por fin debía ser sin tanto sufrimiento.
La alegría se extiende semana tras semana entre triunfos y
resultados positivos que mantenían la distancia con su más inmediato perseguidor,
Acassuso, que apenas había perdido el invicto contra el CALA y caído contra el
vapuleado Italiano, otro hueso difícil de roer para el equipo de Lomas. Con una
distancia de tan solo cuatro puntos, Los Andes visitó al Quemero, que en tan
solo un tiempo estaba dos goles arriba. El ímpetu, la garra y el corazón de los
futbolistas del Milrayitas se llevó por delante al local y, luego del descuento
de Cisterna, se desató la locura con la igualdad del capitán Lorefice. Un punto
clave que se festejó como si fuera el campeonato, por el rival y sobre todo por
el desarrollo del encuentro.
Aunque unos días después trastabilló en casa con la UAI
Urquiza, quien no solo le quitó el invicto sino cortó con una seguidilla de 17
partidos sin derrotas (18 tomando el último cotejo del torneo 2013/14), con 10
triunfos y siete igualdades, una racha y marca histórica en un comienzo de
torneo que no había logrado desde su afiliación a AFA. Con la igualdad sellada
entre Ssuso y Armenio, el goleador de Los Andes tuvo en sus pies asegurarse el
primer puesto a falta de una fecha pero marró el penal en el último minuto y
hubo que esperar siete días más.
Tras pasar una pésima semana, Noriega tuvo revancha ante
Almagro, primero con un cabezazo para la igualdad y luego desde los doce pasos
para desahogarse definitivamente y consagrar al equipo como el mejor de la
zona. La frutilla del postre fue el tercer tanto, convertido por Soria, que
desató la alegría de los jugadores, cuerpo técnico, dirigentes y, por supuesto,
los hichas y simpatizantes del Milrayitas.
Una alegría loca inundó el barrio, entre abrazos, gritos,
lágrimas y banderas flameando. Que esta vuelta olímpica no se termine nunca o
que haya muchas más. Lomas se vistió de rojo y blanco y extendió los
festejos inclusive hasta hoy, gracias aquellos jugadores que se comprometieron,
jugaron, gustaron, sacaron muchos puntos y marcaron a fuego nuestros corazones
Milrayitas. Luego de un gran semestre lleno de felicidad, nos espera el
Nacional…
TORNEO DE TRANSICIÓN 2014
|
LOS ANDES
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Ptos.
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J
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G
|
E
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P
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GF
|
CC
|
Prom.
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LOCAL
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19
|
10
|
5
|
4
|
1
|
14
|
6
|
63,3%
|
VISITANTE
|
22
|
10
|
6
|
4
|
0
|
15
|
6
|
73,3%
|
TOTAL
|
41
|
20
|
11
|
8
|
1
|
29
|
12
|
68,3%
|
CIFRAS Y DATOS
- ¡Por fin campeones!:
Si bien fue compartido con Chacarita Jrs. (Zona A de la B Metro), Los Andes
pudo consagrarse campeón después de 54 años, con el aliciente que fue líder y
protagonista del torneo de punta a punta. Esta gran campaña, decimo ascenso y
título se suman a los conseguidos en el profesionalismo en 1938 y 1957 (Primera
C) y 1960 (Primera B), vez más cercana que obtuvo un título. Desde aquel
ascenso a primera y previo al actual torneo estuvo muy cerca de coronarse en
1992, sin embargo perdió una finalísima contra Ituzaingó –al igualar en uno y
perder por penales en cancha de Independiente-, y en 1977, donde finalizó
escolta del Pincha de Caseros a tan solo dos puntos. Al mismo tiempo, en la
temporada 96/97 del Nacional B fue la vez más cercana que había finalizó
puntero de una zona pero, en esa ocasión, no obtuvo título, ni ascenso sino una
clasificación para la zona campeonato. Una última coincidencia: hace poco más
de 20 años tanto Los Andes como Chacarita ascendían juntos a Nacional B.
- Mejor inicio de un
torneo en su historia: Los Andes escribió en este torneo la mejor página de
su historia al sumar puntos consecutivamente desde el comienzo y durante 17
partidos, previo a la caída con la UAI Urquiza: 10 victorias y siete empates, donde
además de los goles a favor, jugó un papel clave la defensa del equipo que en
ese lapso solo había recibido ocho goles en contra. Los indicios de esta racha
se vieron en la temporada anterior al conservar el invicto durante 12 juegos
(cuatro triunfos y ocho igualdades), estadística que no alcanzaba desde 1965,
con 7 triunfos y 5 pardas (luego cayó 1-5 ante Colón en Lomas). También superó con
creces otras dos grandes rachas más cercanas sin derrotas en un comienzo de
temporada: en 1996 había alcanzado 5 victorias y 6 empates en el Nacional B y
en 1990/91 sumó 4 halagos y 7 pardas. Además, sumando el último partido de la
temporada 2013/14 completó 18 partidos invicto, racha histórica que se ubica
detrás de la cosechada en Primera B entre 1964 y 1965 con 24 partidos (12 por
cada torneo, fin y principio) sin conocer la derrota; la 99/00-00/01 con 22
encuentros (17 en B Nacional y 5 en Primera División) y ascenso a la máxima
categoría; mientras en 1957, año que se consagró campeón de la C, sumó 19
juegos sin derrotas.
- Imbatible de
visitante: La clave de los equipos líderes de cada zona fue cosechar la
mayor cantidad de puntos fuera de su casa. Así es como Los Andes obtuvo seis
triunfos, entre los que se incluye el primer halago en Berisso contra Villa San
Carlos, y cuatro empates, al igual que el otro puntero, Chacarita, que también
finalizó invicto en esa condición. De todos modos, también conservó su buena
performance en el estadio Gallardón, a comparación de la pasada temporada, al
obtener el 63,33% de los puntos disputados.
- Sumó muchos goles:
En apenas dos partidos no pudo abrir su marcador de los 20 cotejos. Así alcanzó
los 29 tantos, cifra que lo coloca 3º en la tabla general de la Primera B
Metro, y superó el coeficiente del torneo anterior al alcanzar 1,45 de gol por
partido contra el 1,069, incluida la Copa Argentina. También estuvo dos tantos
de alcanzar la cifra de 2012/13 con 31 en su haber pero obtenida en 41 partidos.
La victoria más estruendosa de la consagración llegó en casa contra Armenio por
4-0 (Galeano, Franco y dos Noriega) y además fue al equipo que más le convirtió
con un total de 6 tantos. El Milrayitas no marcaba cuatro tantos en el
Gallardón desde 2012 cuando le ganó al Dragón 4-2, aunque este año superó en el
mismo escenario a Chacarita por 5 a 1.
- Desde los 12 pasos:
Desde la pena máxima, Los Andes tuvo cinco oportunidades donde Ale Noriega
infló la red en tres de ellas: ante Barracas, la UAI Urquiza y Almagro, que dio
revancha al desperdiciado en el minuto final contra Italiano y aseguró el
campeonato para el equipo. Por su parte, el Chipi Vera parece tener embrujado
el arco contra la UAI Urquiza al desperdiciar dos penales, desviados por dos
porteros: Ignacio Pietrabono en el campeonato anterior y el último encuentro
ante Matías Cano, quien también le negó festejar.
- Rompe el molde
contra la Villa: Salvo en el primer partido oficial, Villa San Carlos siempre tuvo a mal traer al
Mil Rayitas en este corto historial, si hasta lo mandó a jugar en la promoción
en la temporada 2010/11 tras el 3-1 en Lomas. Pero este campeonato, Los Andes
se desquitó al ganar por primera vez en el Gallardón y también hizo lo mismo en
Berisso. Ahora el Villero lleva cinco victorias contra tres del CALA.
LOS FUTBOLISTAS MILRAYITAS
- El goleador: Nuevamente
Alejandro Noriega se transformó en
el máximo artillero de Los Andes, esta vez al conseguir 11 goles (0,55 de
coeficiente), y estuvo a tan solo uno del capo canioneri del torneo, Abel
Soriano. Sus tantos fueron claves para el ascenso y su principal arma fue el
cabezazo: cuatro goles por esta vía. Pero obviamente que los pies fueron
fundamentales para convertir tres penales y tres de jugada, todos con su pierna
más hábil: la derecha. Sin embargo, tras dejar en el piso al arquero, tocó la
pelota con zurda a arco vacío para sellar la goleada 4-0 ante Armenio. Tras
errar el penal con Italiano que le hubiese asegurado el primer puesto antes de
la última fecha y, por esto, pasar una pésima semana en lo personal, tuvo
revancha al concretar los dos goles que dieron vuelta el partido final contra
Almagro, que valieron para asegurar el campeonato y desatar el delirio en
Lomas. En total, Noriega sumó 21 tantos con la casaca Milrayitas y, a fuerza de
sus goles, el delantero se metió en los corazones de los hinchas.
- Los otros goles:
¿A qué no sabés quién sigue en la lista de goleadores? Sí, el defensor
Maxi García con sus tres primeros
gritos en Lomas. El defensor, quien comenzó el torneo reemplazando a Segovia
(cumplía una sanción de seis partidos) y
confesó haber sido vendedor ambulante, se fue consolidando a base de
buenos rendimientos y goles, al abrir su cuenta personal con aquella exquisita
definición por sobre el cuerpo de Peratta, que luego abrió la polémica con el
Chipi Vera, quien había asegurado en la línea, pero el árbitro ya lo había
cobrado. Luego convirtió ante Platense y abrió la cuenta con un fuerte cabezazo
ante Villa San Carlos. Le siguen en la lista cinco futbolistas con dos goles:
Diego Gaelano, con dos golazos a
Barracas y Armenio;
Chipi Vera,
uno detrás de otro, ante Comu y luego con
Platense;
Fernando Lorefice, con dos
gritos importantísimos ante San Carlos y, el quedará grabado en las retinas de
los hinchas, Acassuso que selló la igualdad;
Mauro Pajón, con dos fierrazos,
en especial ante Italiano; y el
Tortu
Segovia, que casi sobre del final aportó su granito de arena, un tanto
menos que la temporada anterior. Con uno sumaron al haber
Dani Franco, con un sutil toque;
Damián Luna, convirtió ante la UAI Urquiza en su regreso con la
Milrayitas;
Diego Cisterna, clave
para la remontada ante Ssuso en Vicente López, y
Cristian Soria, debut en la red que aseguró el campeonato y
ascenso. Por último, Galeano tiró un centro tan bueno que Hernán Ortiz no pudo
evitar meterla contra su valla, para que los de Lomas se queden con el triunfo
y le quite el invicto al Quemero.
- Lazos de sangre:
Al convertir dos veces en el torneo,
Ricardo
‘Chipi’ Vera superó en goles a su hermano Mario con la casaca de Los Andes
con un total de 10 festejo
s, tras que en la última fecha del torneo anterior alcanzara
a igualarlo. Sin embargo, aquel llamado ‘Burrito Ortega de la B’ convirtió
cinco de penal, mientras el Chipi apenas tres pero desperdició dos por esta
vía: como se escribió anteriormente Vera parece tener embrujado el arco contra
la UAI Urquiza, donde Ignacio Pietrabono -en el campeonato anterior- y Matías
Cano -en el último torneo- le negaron festejar.
Sin embargo, gracias al campeonato de Los Andes, el Chipi
Vera generó una coincidencia esencial con su hermano: ambos ascendieron de
categoría con el Milrayitas. Vale aclarar algunos otros números: el hermano
mayor disputó 44 partidos entre 1997 y 2000 (ascendió a primera con Los Andes)
contra 59 del Chipi, en tan solo un año y medio.
- Presencias:
Cinco futbolistas acumularon 20 partidos aunque solo
Maxi Gagliardo alcanzó el total de minutos jugados con 1800’.
También con la máxima cantidad de presencias están el goleador
Alejandro
Noriega (1797’);
Emma Martínez (1791’),
quien nuevamente es uno de los jugadores con más presencias por su
gran rendimiento en la última línea del
Milrayita;
Diego Cisterna (1586’), que cumplió por su
sector y
su figura creció con el correr
de los partidos, y el
Chipi Vera
(1569’) que siempre exige a las defensas rivales. Luego le siguen con 19
encuentros Maxi García (1710’) y Daniel Franco (1661’), estandartes en la
defensa, y Fernando Lorefice (1650’), capitán, figura y alma del equipo. Un
pasito detrás Lucho Zeballos (
1560’), otro importante volante con ya tres
temporadas en el club, y Diego Galeano (1225’), que sorprendió a propios y
extraños con pura velocidad y amagos por los laterales. Debajo de esta línea se
encuentra Maxi Barreiro con 15 (1178’), Juan Segovia con 13 (864’), el Rana
Barale (187’) y Mauro Pajón con 10 (412’). Luego le siguen en minuto jugado
Gregorio Abregú (201’), Gustavo Ruiz Díaz (158’), Damián Luna (130’), Franco
Ruibal (80’), Matías Linas (51’), Christian Soria (43’), Pablo De Hoyos (42’),
Martín Rose (37’) y Julián Vivas (7’).
- Los regresos: Regresaron
tres canteranos al club. Quizás el más esperado por lo que implica para el club
fue
Gustavo Ruiz Díaz, quien no se
calzaba la Milrayitas desde 2008, unos meses previos al ascenso, y regresó este
año para completar su sueño personal: ser campeón con Los Andes. Luego de haber
pisado nuevamente el Gallardón declaró a todos los micrófonos sus sensaciones:
“Fue una emoción que hacía mucho no la sentía”, dijo casi conmovido hasta las
lágrimas el Toro. El volante tuvo un gran recibimiento del público. Tres años
después,
Maxi Barreiro volvió a
calzarse la Milrayitas mucho más maduro en juego y actitud. El Pela
constantemente fue salida por el sector izquierdo, fuente de velocidad y
sorpresa.
Franco Ruibal también
retornó, tras su buen paso por Dock Sud, y estuvo cerca de convertir en Los
Andes; sin embargo el chiquitito hace una gran diferencia con amagos y rapidez
por las puntas.
Otro regreso esperado fue el de Damián Luna, quien en pocos minutos y apenas ingresado convirtió un
gol ante la UAI Urquiza
- Los debutantes con
la casaca de Lomas: 6 debutantes con la casaca Mil Rayitas: Gregorio
Abregú, Diego Cisterna, Pablo De Hoyos, Diego Galeano, Matías Linas y Christian
Soria, de los cuales también tres tuvieron su bautismo de fuego en la red.
- Lejos del fair-play:
48 tarjetas para los futbolistas de Los Andes, incluidas las dos únicas
expulsiones al capitán Fernando Lorefice y Luis Zeballos, tras la temporada
anterior con 19 rojas. Daniel Franco acumuló más amonestaciones con 7.
