Después de quizás alguna oportunidad ahogada por Mauricio Aquino (en especial aquellas que no pudo resolver Gonzalo Salega), desde la rapidez y picardía de Dieguito Galeano, se abrió el manual del contragolpe mortal que dejó grogui al rival: el delantero jugó con Mbombaj, quien le devolvió la pelota delante del 1 local. Tras cruzar su remate, el Chapa festejó con todo desahogo el resultado definitivo. “Si bien el pase fue preciso para que remate de primera, la pelota me pica mal en el instante del disparo y la agarré medio mordida. El arquero se tiró para atrás creyendo que le iba a pegar fuerte y no pudo reaccionar ante el efecto”, explicó el delantero, que comienza a sumar minutos después de haber tenido covid y le sirven para agarrar nuevamente ritmo. “Si bien mi juego se basa más en asistir, me pone contento convertir y mucho más ganar”, comentó Galeano quien volvió a festejar, con beso de escudito de por medio, después de más de un año (el anterior lo había concretado en noviembre de 2019 contra JJ Urquiza) y ya cosecha 9 tantos en 72 encuentros vistiendo la Milrayitas.
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